Cómo cuidar tus joyas en verano

En www.relojesdeacero.com

El verano es la época perfecta para lucir tus joyas. Los escotes pronunciados, los tirantes y mangas cortas o el cabello recogido permiten que un collar, una pulsera o unos pendientes brillen como nunca. Por eso, no desaproveches esta época y acompaña tus looks con joyas que potencien tu personalidad y te hagan brillar como nunca. 

Sin embargo las joayas en verano necesitan cuidarse de manera especial. En esta época del año, suele aumentar el “uso indebido” y por eso las joyas pueden desmerecerse mucho en los meses de verano, especialmente durante las vacaciones.  
 

La plata, las gemas y piedras, el esmalte… e incluso el oro, requieren de algunos cuidados básicos y una limpieza adecuada para preservar la belleza de las piezas.

6 consejos para cuidar tus joyas en verano

- Nunca bañarse en la playa o piscina con las joyas puestas ya que tanto el cloro de la piscina como la sal del mar pueden ocasionar serios daños a las joyas, sobre todo a pulseras de cuero (que se pueden decolorar y agrietar). Una vez pasadas las vacaciones, lo conveniente es someterlas a una limpieza profesional para no dañarlas

 
- Nunca darse el protector solar con las joyas puestas: si vas a darte cualquier tipo de crema o aceite (ya sea protector solar o meramente hidratante en tu día a día), debes quitarte tus joyas primero y volverlas a poner después de esperar unos minutos a que se sequen un poco y la piel deje de estar untosa. 
 
- Ante una jornada de calor intenso o de actividad física, mejor dejar las joyas en casa o el hotel, y lucirlas por la noche. El sudor de nuestra piel afecta negativamente a las joyas, que pueden oxidarse con mayor rapidez e incluso comenzar a ennegrecere al poco tiempo de estar en contacto con el sudor. Los distintos tipos de sudoración afectan de forma diferente a las joyas, pero lo mejor es quitarlas siempre que se sospeche que la piel pueda sudar.

En www.relojesdeacero.com

- En el spa o balneario, nada de joyas. Se ha comprobado que los componentes del agua preparada para spas y balnerarios son muy perjudiciales para la joyería, ya que se perjudica seriamente su brillo y color, además del correspondiente peligro de pérdida de las piedras e incluso de la joya completa, que se nos puede salir sin darnos cuenta. 

- Cuidado con los productos químicos sobre la piel. Las piedras preciosas merecen una atención especial, por eso, huye de cosméticos, lacas o perfumes y colonias después de colocarte tus joyas. Siempre es mejor que te acicales antes de lucirlas para protegerlas al máximo. Y recuerda: nada de rociar perfume sobre la joya, ella ya brilla por sí sola.

- Evita cambios bruscos de temperatura. Es de sobra conocido que los diamantes, a diferencia de otras joyas, no se rayan y son de los materiales más resistentes que podemos encontrar. No obstante, los cambios bruscos de temperatura tampoco son recomendables, así que intenta evitarlos para cuidar al máximo su calidad y pureza.

Todas nuestras recomendaciones de cuidado y limpieza ayudarán a que tus joyas sobrevivan perfectamente a tus vacaciones para que las disfrutes sin disgustos. ¡Cuídalas y lúcelas siempre como el primer día!